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Newell’s cayó con San Lorenzo e hipotecó el pase a cuartos
El equipo de Javier Sanguinetti no tuvo la intensidad y solidez habitual y perdió ante un rival que llegó a los tumbos. La lepra ya no depende de sí mismo para clasificar a cuartos y deberá ir por la victoria en el cierra ante el lobo.
Newell’s dejó pasar la gran chance y ahora hipotecó en demasía la oportunidad de clasificarse a los cuartos de final de la Copa de la Liga Profesional, aunque la historia no está cerrada y hay esperanzas. La lepra cayó 2 a 1 ante un San Lorenzo que venía a los tumbos, pero que capitalizó las groserías defensivas rojinegras y dio el gran golpe en el Coloso. Ahora el equipo de Javier Sanguinetti ya no depende de sí mismo para terminar dentro del top 4, que todavía integra porque abrió justamente la penúltima fecha.
Fue un duro traspié, Newell’s nunca tuvo las riendas del partido y si bien entregó todo, la sensación fue de desazón por la chance dilapidada ante un Coloso repleto, que igual despidió al equipo con un aplauso por el esfuerzo de luchar y buscar el empate hasta el final.
La lesión y baja de Juanchón García y algunos jugadores diezmados por gripe como Castro y Garro, que entraron en el complemento, sin dudas que atentaron contra la lepra. Igual, todavía el sueño está, pero deberá ir en busca de una victoria ante el Lobo para acceder a los cuartos de final.
Hay que decir que en el primer tiempo Newell’s nunca supo imponer condiciones con autoridad en el desarrollo. Fue impreciso, lento y previsible en el traslado de la pelota. Además entregó grietas atrás que el rival detectó y lo lastimó.
Es que recién a los 17 minutos Panchito González probó al arco desde afuera y el tiro se fue alto. A la lepra le costó asociarse y se repitió en los centros de costado de Vangioni y Méndez, que ni Reasco ni Funez lograron conectar con pericia en la maraña de defensores de San Lorenzo.
Justamente tras un intento fallido de cabeza de Nazareno Funez que se fue ancho llegó la apertura de la visita. Y significó un verdadero mazazo para las aspiraciones rojinegras. Todo comenzó con una defensa leprosa que quedó abierta de par en par. Uvita Fernández remató de arremetida, tapó Arboleda, pero la pelota fue rumbo al arco y tras un pirueta notable despejó sobre la línea Willer Ditta. Prosiguió el peligro. Remató Agustín Giay y salvó Julián Fernández, insistió Giay con el centro y por el lado izquierdo conectó al gol Agustín Martegani, con un tiro bajo que manoteó Arboleda.
San Lorenzo en la primera que aceleró logró agitar la red y Newell’s, que ya tenía dudas y falta de precisión, sintió el impacto y desde allí supo que la noche no sería nada sencilla. Empujó sin ideas hasta el final de la etapa y se fue al vestuario repleto de incertidumbre y fastidio porque las cosas no salieron y los puntos eran todos para el rival.
En la reanudación Newell’s salió decidido a entregar el resto en pos de la remontada. Pero fue más corazón que fútbol. Enseguida Willer Ditta apareció en el área visitante y de sobre pique disparó por encima del horizontal.
San Lorenzo estaba muy cómodo y demoraba todo una eternidad en cada reanudación. El revulsivo del DT Javier Sanguinetti fueron los ingresos de Castro y Garro (por Pablo Pérez y Funez), ambos afectados en la previa por síntomas gripales.
Y todo empeoró para la lepra. Sobre los 15 minutos del complemento Panchito González hizo lo que no debía. Dio un pase fallido al medio y agarró de espaldas a Nicolás Castro, la pelota regalada derivó a Federico Gattoni, que desde la puerta del área la clavó en el ángulo de Arboleda.
Adentro el debutante Genaro Rossi y a seguir remando. Gran centro de Nico Castro y Lema sólo falló de cabeza el descuento por centímetros.
Y con suspenso llegó el descuento en una jugada de monitor y lupa. Cabeceó Lema, no la pudo sacar Jeremías James y el balón entró pidiendo permiso al arco de Torrico. Si bien Justo Giani estaba adelantado no participó de la jugada, pero igual Herrera cobró off-side. Se activó el VAR y varios minutos después se convalidó el descuento leproso, a más de 15 minutos del final.
De ahí en más fue todo pura adrenalina hasta el epílogo. Newell’s fue por todo con el cuchillo debajo del poncho. Con pocas luces, sin elaborar por abajo, pero con enorme despliegue y voluntad.
El equipo de Sanguinetti con la poca nafta que tenía en el tanque producto del empuje y el enorme esfuerzo de no rendirse jamás fue por la heroica. Jugaba contra el reloj, la parsimonia de San Lorenzo para lentificar todo y contra sus propias limitaciones, ya que su único recurso a esa altura era un centro salvador a la cabeza de Lema. Y el resultado no se movió.
Fue derrota 1-2. Ahora a esperar los resultados de las canchas ajenas y ir a jugarse a todo o nada en la visita de la fecha siguiente ante Gimnasia en La Plata. La gente aplaudió el esfuerzo, pero esta vez el equipo no tuvo intensidad en el juego y la clasificación está entre signos de interrogación.